Ingredientes
- 130 g (1 taza) de harina de arrurruz o tapioca
- 200 g (2 tazas) de harina de avellanas o almendras
- 60 g (1/2 taza) de semillas de chía
- 1 cucharadita de bicarbonato de sodio
- 1/2 cucharadita de sal
- 2 cucharadas de semillas de calabaza
- 2 cucharadas de semillas de girasol
- 6 huevos
- 2 cucharaditas de vinagre de sidra de manzana
- 300 g de calabacín rallado
- 2 cucharadas de aceitunas negras finamente picadas
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Método
Paso 1.
Precalentar el horno a 160 ° C y forrar un molde de pan de 450 g con papel de hornear.
Paso 2.
Combine la harina de arrurruz, la harina de avellana, las semillas de chía, el bicarbonato de sodio, la sal y la mitad de las semillas de calabaza y girasol en un tazón grande. En un recipiente aparte, bata los huevos ligeramente con un tenedor y agregue el vinagre de sidra de manzana, el calabacín rallado y las aceitunas picadas. Combine los dos tazones y mezcle todo con una cuchara para formar una masa agradable, espesa y ligeramente húmeda.
Paso 3.
Vierta la masa en un molde para pan y espolvoree sobre las semillas restantes de calabaza y girasol.
Paso 4.
Hornee en el horno durante 1 hora o hasta que estén doradas por encima. Para probar, presione suavemente la parte superior del pan; si mantiene su forma, está listo.
Paso 5.
Disfrútelo recién salido del horno con su pasta para untar favorita; si lo come más tarde, tueste bajo la parrilla para obtener mejores resultados.
Rinde 1 hogaza
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